Fernando Casado recibió esta noche un Casandra al Mérito que resulta imposible justificar más de lo que estuvo. Y me alegro que se le haya dado ese reconocimiento en vida, porque me temía que no llegara a pasar.

No recuerdo cuándo escuché por primera vez la dulce y firme voz del Magistrado entonando una de las decenas de criollas que sólo él sabe cantar, pero estoy seguro que mis padres son los culpables de que desde niño estuviera expuesto a esas canciones. Así también conocí a Niní Cáffaro, a Lope Balaguer, Sonia Silvestre, Silvio Rodríguez, Alberto Cortez, Mercedes Sosa y a otros cantantes de aquellos años.

Tristemente, el Magistrado ha ido menguando en su carrera, abrumado por los años y el poco apoyo de los medios que han preferido darle paso a “nuevos exponentes del arte”.

Y es justamente esa frase la que me da un sabor agridulce. Hoy Don Fernando Casado, al recibir este justo reconocimiento, quizás su primer Casandra (¿me confirman esto?), pronunció palabras rebosantes de humildad y decencia, agradeció su carrera al Maestro Rafael Solano, otro inmenso roble de nuestro arte (igualmente olvidado por el arrolle de los “nuevos exponentes del arte”). Pero lo que más me llamó la atención de las palabras del Magistrado fue su frase final, donde aboga porque trabajemos por “el arte que merece nuestra Nación”.

¿Es Doble T y el Crok el tipo de arte que merece nuestra Nación? ¿O es Mozart La Para? ¿O la Materialista? ¿O quizás el Sensato del Patio? Pero quizás no es justo que le endilgue el dado sólo a la “música urbana”. ¡Seguramente el Cata sí es el arte que merece nuestra Nación, máxime por el endoso que le ha dado Shakira! Y si no, ahí está Julián Oro Duro para dar la cara. ¿Y cómo olvidar a Omega el Fuerte?

Inmediatamente después de escuchar “Como me besabas tú” y “Lucía”, interpretaciones magistrales de Fernando Casado, es perfectamente adecuado que escuchemos “Me tienen dema (Golo Goló)”, o “El Sapito”. Sin duda alguna, ese es el arte que merece nuestra Nación.

Yo no me quejo de que los tiempos cambien… pero me apena profundamente que la generación que viene subiendo esté olvidándose tan pronto y garrafalmente de los artistas que valen la pena. ¿Cómo es posible que tanta gente en Twitter y Facebook desconozca quién es Fernando Casado cuando se saben de memoria todas las estupendas líricas de los “nuevos exponentes del arte”? ¿Con qué jodido derecho?

Si pudiera preguntarle a Fernando Casado cuatro características que debe cultivar un artista para ser parte del arte que merece nuestra Nación, sospecho que me diría: Trascendencia, Durabilidad, Humildad y Decencia

Trascendencia

Hoy miles alaban y gozan con los “nuevos exponentes del arte”, pero de verdad que quisiera que piensen en esto: ¿Quién será trascendente? ¿Cuál de ellos soportará el paso de los años y tendrá vigencia cuando ya sea un anciano? ¿Quién será un referente del arte dentro de, digamos, 10 ó 5 años?

Durabilidad

Lope Balaguer tuvo una carrera de 66 años y mantiene su voz casi intacta aunque ya no canta. De verdad, ¿ustedes se imaginan que en 40 años cualquiera de estos “nuevos exponentes del arte” subirá a recibir un Casandra al Mérito por su trayectoria artística? En serio… ¿se imaginan eso?

Humildad y don de gente

El reguettón y la música urbana o dembow se caracterízan por varias cosas particulares. Una de ellas es lo que se conoce como “tiraera” (así se dice). Mengano saca un disco y ridiculiza a Zutano. Zutano a su vez saca un disco para atacar a Mengano y a Fulano. Es una guerra permanente donde no hay ni dos cheles de humildad y donde la decencia y las buenas costumbres brillan por su ausencia.

Decencia

Los artistas están condenados a ser más que artistas y su labor no se limita a los escenarios y los estudios de grabación. Los artistas, debido al profundo arrastre que tienen en su apogeo, y a la innegable influencia que ejercen sobre las masas, tienen que saber que son vistos como modelos a seguir. Y Omega golpea a las mujeres y eso no es nada. Y con la droga que meten muchos “nuevos exponentes del arte” se paga la deuda externa. Y las letras de sus “canciones” reflejan todo tipo de desvalores.

Ay, Don Fernando

El arte que merece nuestra Nación, por lo visto, es el que está de moda… si no, no sería taaaan popular, ¿verdad? Pues estamos fregados, Don Fernando. Vamos a tener que morirnos o irnos de este país porque definitivamente, la Nación que usted y yo soñamos no está recibiendo el arte que merece… sino el que la desmerece. Y mire, habrán montones de personas que no estarán de acuerdo conmigo y menos con usted. Quizás algunos se expresen en los comentarios (aunque lo dudo, suelen evitar todo lo que exiga ponerse a pensar). Pero en resumen, Don Fernando… que estamos bien fregados. 🙁

Felicidades a Fernando Casado, una gloria viviente de nuestro arte. Les dejo con “Como me besabas tú“.

2 Comments El Arte que merece nuestra Nación

  1. Ronny Encarnacion

    Muy correcto tu comentario, estoy muy de acuerdo contigo.
    Por eso este pueblo tiene los gobernantes que se merecen

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    1. Dario Martínez Batlle

      No, si nos vamos a los gobernantes… uffff… pero al menos (en favor de los gobernantes) se puede alegar que sí son “durables”. Balaguer, Bosch y Peña Gómez dominaron la escena política por más de 40 (Balaguer 50+) años. Y con Faraonel, parece que tenemos un nuevo pichón.

      Nada, volvamos al Arte…

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