Mucho se ha hablado sobre el estudio que el Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (cariñosamente conocido como ProConsumidor) diera a conocer la semana pasada, sobre la composición de los salamis que se venden en nuestro país. Había evitado tocar el tema, pero ayer se me agotó la tolerancia. Dudo mucho que la doctora Altagracia Paulino o las personas que manejan las redes sociales de la entidad se tomen la molestia de responder mis preguntas, pues yo no tengo empresa ni produzco salami (aunque cada día, como manda natura, religiosamente elaboro parte de su materia prima).
Yo sólo soy un ciudadano común y corriente que va al supermercado más veces de las que quisiera para tomar de los anaqueles los productos que allá se ofertan. En otras palabras, no soy productor, sino un consumidor. Curiosamente, del usuario de @ProConsumidorRD, yo soy parte del 66% de su handle. Y como el prefijo “Pro” significa “a favor de”, lo mismo que como apócope de “protección” en la razón social del organismo, no sé… me sale pensar que ProConsumidor está para defenderme.
Curioso al fin, quise saber si es cierto que puedo contar con ProConsumidor como un aliado en mi defensa. Busqué en el portal de la institución y encontré que esta es su misión: “Proteger a los consumidores y usuarios de bienes y servicios, mediante la aplicación de las normas jurídicas establecidas”. Y los valores que dice sostener son: “Solidaridad, Honestidad, Responsabilidad, Transparencia, Compromiso, Lealtad, Identidad”. Suena bien, ¿verdad?
Antes de continuar, vale indicar que evito ser mezquino. ProConsumidor tiene años trabajando y enarbolando la defensa de los consumidores y es de las pocas instituciones gubernamentales que goza de mi aprecio, al punto que he alabado en más de una ocasión sus esfuerzos en favor del pueblo. Sin embargo, el manejo del tema de los salamis ha sido tan pobre que desluce mucho todo lo anterior.
Se me ocurre preguntar, aunque no espero respuesta de los incumbentes, algunas cosas.
1. ¿Proconsumidor me defiende?
Sí, ya sé que su misión dice que me defiende a mí y a todos los consumidores como yo. Lo curioso es que en muchos casos previos sí me sentí defendido, pero con lo de los salamis, sinceramente no.
En enero promulgaron que los bancos debían ajustarse a la norma de cobrar intereses sobre el saldo restante de pago, no sobre la deuda total y me sentí defendido. Hablaron claramente con nombres y apellidos sobre uno de los sectores más poderosos del país, y me sentí defendido.
Permanentemente ProConsumidor explica que los establecimientos no deben cobrar 10% de servicio cuando nosotros compramos en el local “para llevar”. Con eso yo me siento defendido.
Los comerciantes pretenden que las compras en Internet sean (más) gravadas por impuestos y ProConsumidor se opone tajantemente. Yo me siento defendido.
El reglamento de venta de gas licuado de petróleo quiere ser cambiado y ProConsumidor insiste en que se mantenga como está, pesando el gas despachado, en vez de vender por volumen como quieren los detallistas. ProConsumidor cierra plantas envasadoras de gas que violan la ley. Yo me siento defendido.
Los productores de pollo quieren subir el precio de venta a lo que ellos les de la gana. ProConsumidor interviene y logra que se fije un precio razonable. Más aún, ProConsumidor promueve activamente que la población se sume a la idea de “un día sin pollo” en contra de las alzas de los productores. Yo me siento defendido.
Buscar “proconsumidor” en los portales de periódicos locales arroja una gran cantidad de casos en los que la institución ha honrado su misión, ofreciendo nombres de empresas dañinas, cantidades y fechas exactas y cerrando a los infractores. Yo me siento defendido.
ProConsumidor denuncia que el 97% de las muestras de salami no cumple los estándares mínimos de aporte nutricional, y que el 15% de dichas muestras presenta elementos cancerígenos y coliformes fecales (la forma bonita de decir “mierda”). Yo… me quedo esperando.
No me siento defendido en el salamigate porque ProConsumidor sabía desde el año pasado que hay problemas con el salami y no lo dijo con nombres ni cerraron empresas como antes. Alegan que la ley 358-05 no permite revelar nombres en investigaciones, pero resulta muy curioso que en decenas de casos previos han hablado responsablemente con nombres y apellidos.
Dicen además que los fabricantes de salami sabían de los resultados del estudio de salami desde marzo de 2012, y que ante la no acción de las empresas del sector difundieron el informe. WTF?
Los productores no son dignos de confiar porque jamás van a ir en contra de sus intereses. Es labor de ProConsumidor señalar diáfanamente a los responsables de la crisis de imagen del salami. Es lo que espero yo para sentirme defendido. Es a lo que nos ha acostumbrado Altagracia Paulino y su gestión. Verticalidad a toda prueba, enfrentando a la banca, a las telefónicas, a las cadenas de comida rápida, a los comerciantes, a los distribuidores de combustibles. ¿Por qué ese recelo para denunciar a los productores de embutidos?
ProConsumidor claramente está jugando a decir el pecado pero no el pecador. De repente se han revestido de una dañina y contraproducente “prudencia” que les impide hablar claramente como en el pasado. ¿Qué hay detrás de ello?
2. ¿Calcularon el impacto ante la industria?
La denuncia de ProConsumidor no es mala en sí misma. Se parece a lo que han hecho desde el principio. El problema viene cuando no identifican a los responsables de la mala calidad del salami. Al dejar en “veremos” el desglose de nombres y mantenerse en pasar paños tibios, fomentan la desconfianza sobre toda la industria de embutidos. 85% de los salamis NO contienen cancerígenos ni mierda. Casi todos están por debajo del mínimo de nutrición necesario, pero eso no asombra. Sin embargo, con su denuncia irresponsable los consumidores no sabemos cuál salami podemos comprar pues ninguno está identificado. El 100% de los salamis es MALO gracias a ProConsumidor.
Quiere decir que las empresas que hacen el salami nutritivo y libre de “aditivos” está sufriendo injustamente una reducción de sus ventas. ¿Por qué ninguna, salvo Induveca, ha dado la cara? Según esta nota, la otrora empresa vegana domina el 60% del mercado de embutidos y ha visto reducir sus ventas en un 35% en la época del salamigate.
Probablemente ProConsumidor alegue que todas las empresas tenían conocimiento del estudio y a todas se les hicieron exigencias. ProConsumidor afirma que hay empresas que nunca acudieron a sus llamados y que no aparecen. ¿Cuál es el miedo de denunciarlas? ¿Por qué arriesgar la salud de la población ante empresas que no dan la cara? ¿Para qué esperar un segundo estudio? ¿Qué pasa si el segundo estudio arroja resultados MUY diferentes a los presentados previamente?
Ahora bien, yo espero que ProConsumidor nunca deje de denunciar cosas sólo porque se trata de un sector central de la economía o porque le harían daño a los productores. Si lo hacen mal, DEBEN denunciarlo con nombres y apellidos. El problema de las “medias denuncias” como la que ha hecho ProConsumidor es justamente que embarra a los buenos con los malos y quienes más perdemos somos nosotros.
Ñapa: ¿Por qué me bloquearon en Twitter?
Esta pregunta es la más tonta de todas. Esta mañana lancé ácidas críticas a ProConsumidor en Twitter. Para redactar esta limonada quise ver el timeline del organismo y me doy cuenta de que no tengo acceso al mismo. De nuevo, WTF? ¿Quiere decir que el Community Manager de @ProConsumidorRD no permite cuestionamientos y bloquea a quienes tengan opiniones contrarias a las suyas?
No es por nada, yo sólo curioso como siempre. En un sentido me siento contento… después del bloqueo de @sergiocarlo esto es lo más jevy que me ha pasado 🙂
En el fondo, me parece una práctica incorrecta de las personas que manejan la cuenta. Si bien hay cada vez más personas que se dedican a “trollear”, mis cuestionamientos a @ProConsumidorRD distan mucho de ser “por joder la paciencia”. Un Community Manager no debe tener epidermis tan fina, creo yo. 😀
Lo grande, Dario, es que es incorrecto decif que estan bajos de proteina pues lo compararon con la norma de salamis madurados, tipo genoa, donde la perdida de agua aumenta el % de todo lo otro.
La norma de este tipo de salami, q tecnicamenre es un producto cocido tipo salchicha, es diferente. Se necesita agregar hielo en el proceso, por lo q no se exige q haya 16% de proteina. Imaginate, la carne fresca MAGRA, sin la grasa, contiene 16% de proteina, con la grasa algo menos.
PD. Contaminacion con bacterias fecales no significa q haya mierda. Esas bacterias pueden llegar por el agua, por las manos del manipulador en fabrica o colmado. Simplemente revelan q algo en el proceso violo normas de higiene y podrian haber otros patogenos ahi. Metida de pata GRANDE de Altagracia, revelo ignorancia en la materia ahi.
Excelentes datos, Jorge. A mí me preocupa que uno de los pocos organismos que hacía algo por el pueblo esté dando ese tipo de traspiés. Me da grima pensar que comiencen a salir “estudios” de diversos rubros sin identificar a los malos actores.
Espero que la cosa mejore sustancialmente para ProConsumidor, pero realmente es como dicen “un error de pocos minutos hecha a perder toda una vida de credibilidad”.
Datos interesantes aporta Jorge.
Ahora bien, la cantidad de nitrito es algo que preocupa pues es algo que provoca cáncer y se lo agregan para darle ese colorcito rojizo a una mezcla que tiene un bajo nivel de carne…
http://es.wikipedia.org/wiki/Nitrito
Me gustaría ver el programa de Nuria y el estudio que de seguro está ella haciendo por su cuenta…
Oliver, si supieras que la zanahoria, el rábano, las espinacas y otros vegetales contienen más partes por millón de nitritos que el mismo salami.
Otro error es decir que se usa MDM para sustituir la carne en estos embutidos, cuando el MDM complementa la formulación de los embutidos. Complementar y sustituir no es lo mismo.
Por otro lado, un estudio estadístico debe ser proporcional. Si uno de los miembros de la población domina un 60% del mercado, no puedes tomar sólo UNA única muestra, al igual que lo harías con otra que solo domine el 2% de la población.
Los datos serán erróneos.
En fin, un “estudio” plagado de errores desde el principio y tratando de llevar a cabo alguna agenda oculta.
Bueno, vamos como decía Jack, por partes.
Una o dos para Tati (la de Proconsumidor). Si, Tati, el artículo 121 de la ley dice:
Art. 121.- Confidencialidad: La información que haya sido proporcionada a la Dirección Ejecutiva de Pro Consumidor, durante el procedimiento de investigación, se considerará de carácter confidencial con respecto a terceros.
Tatiiiii, pero tu sabes que esa información a la que se refiere el citado artículo, no fue que a proconsumidor le fue revelado que el salami tenía mierda!, NO eso lo averiguó Proconsumidor por su cuenta. Este artículo se refiere a secretos comerciales o industriales que tengan que ser, o sean revelados a Proconsumidor como parte de una investigación.
Esto, queda mas que claro en el párrafo III de este mismo artículo que dice:
Párrafo III.- La obligación de Pro Consumidor de mantener la confidencialidad de los secretos comerciales o industriales frente a terceros se perderá cuando así lo dispongan los tribunales competentes mediante sentencia definitiva.
MANTENER LA CONFIDENCIALIDAD DE LOS SECRETOS COMERCIALESSSS, TATIIIIII….
Ademas, no podemos pensar que la ley está hecha para proteger a los infractores, porque en el caso de la mierda, se puede argumentar desconocimiento, pero en el caso de los nitritos no, son una materia prima del salami y los nitritos causan cancer.
En este sentido, el artículo 122 de la ley dice:
Art. 122.- De las medidas precautorias: En cualquier momento del procedimiento de investigación, la Dirección Ejecutiva de Pro Consumidor podrá ordenar las medidas precautorias que tengan por objeto hacer cesar la actuación que se presume ilícita, pudiendo incluso solicitar el auxilio de la fuerza pública.
O sea que desde que Proconsumidor se dió cuenta de que el salami tenía cancerígenos y pupú, pudo tomar las medidas precautorias necesarias para evitar que se provoque cancer a las personas, y el riesgo a la salud pública, porque me imagino que Tati presume eso como ilicito.
Los fabricantes de salami que le echaban (o le ECHAN?) nitrito al salami, estan actuando como el guason de Colorado, y parafraseando uno de los cargos, me atrevo a decir sin temor a equivocarme, que: los salamiseros actuaron “Ilegal y criminalmente, en circunstancias que evidencian una actitud de maldad universal, manifiestando una indiferencia extrema hacia valor de la vida humana en general, y a sabiendas, asumieron una conducta que creó un grave riesgo para la salud pública en general”, con el silencio y la inacción de Proconsumidor, a esta institución le cabe lo mismo, solo que agregándole dos palabras al principio: “Conspirar para Ilegal y … ”
Tatiiii, te quedan 14 días, puedes “Corregir lo que está mal” y “Hacer lo que nunca se ha hecho”, porque no cierras dos o tres fabricas de salami??? Llévatelo CUNDO!!!