¿Así que quieres ser piloto de avión? Aquí les dejo algunos sabios consejos para tener éxito en esa carrera…
- Procura siempre mantener un balance muy estricto entre la cantidad de despegues y la cantidad de aterrizajes que hagas. Cualquier balance entre estas dos cifras puede ser fatal.
- Despegas si quieres, pero si despegaste, es obligatorio que aterrices. No lo olvides.
- Volar no es peligroso. Lo peligroso es estrellarse.
- Siempre ha sido más agradable estar en tierra con deseos de estar volando, que estar volando con deseos de estar en tierra.
- Hay tres simples reglas para realizar un suave aterrizaje. Lo malo es que nadie las conoce.
- Algunas avionetas tienen la hélice en frente de la cabina del piloto. Está ahí para echarle fresco al pobre tipo. Si se detiene la hélice, podrás ver cómo el piloto se pone sudoroso de una vez.
- Si tienes dudas, mantén la altitud. No se conocen casos de aviones que hayan chocado contra el cielo.
- Un buen aterrizaje es aquél del cual luego puedes salir caminando. Un aterrizaje excepcional es aquél tras el cual todavía puedes usar de nuevo el avión.
- Si luego de que el avión se detiene no ves una caterva de camiones de bomberos vueltos locos hacia tu avión, es porque aterrizaste con las ruedas.
- La probabilidad de sobrevivir a un aterrizaje es inversamente proporcional al ángulo de aterrizaje. A mayor ángulo de aterrizaje, menos probabilidad de sobrevivir, y viceversa.
- Hay pilotos viejos y hay pilotos arretaos. Pero hay muy pocos pilotos viejos y arretaos.
- En la batalla eterna entre los objetos hechos de aluminio viajando a cientos de kilómetros por hora, y el suelo viajando a cero kilómetro por hora, el suelo aún no conoce la derrota.